Cuba: Rechazo al informe que afirma que el derribo de los aviones fue en aguas internacionales.
Montreal. Afp, Efe, Reuter.
El régimen de Fidel Castro rechazó de forma tajante las conclusiones de una investigación internacional sobre el derribo de dos avionetas civiles por cazas cubanos por considerar que sólo recoge la versión de Estados Unidos. El Consejo de la Organización de Aviación Civil (OACI) tenía previsto ayer discutir el resultado de la investigación sobre el ataque cubano que provocó la muerte de cuatro pilotos de «Hermanos al Rescate».
El presidente de la Asamblea Nacional cubana, Ricardo Alarcón, declaró el jueves en Montreal que el informe de la OACI «es falso. Contiene mentiras y fabricaciones introducidas por Estados Unidos». Ese día las discusiones se vieron eclipsadas por la filtración del informe a la Prensa, que provocó fuertes protestas por parte de Cuba. Alarcón desacreditó las conclusiones de la comisión de este organismo de Naciones Unidas, que ayer se disponía a hacer público el informe final.
El informe respalda la versión de Washington de que los cazas Mig cubanos derribaron las avionetas civiles en aguas internacionales y no dentro del espacio aéreo de Cuba, como ha mantenido hasta ahora el régimen de La Habana. De confirmarse, esta conclusión representa un importante golpe diplomático para Fidel Castro y refuerza la posición del presidente norteamericano, Bill Clinton, quien utilizó el incidente para justificar la aprobación de la ley Helms-Burton.
Alarcón subrayó que"«nunca hubo interés por investigar nada, sino sólo de condenar a Cuba», y explicó que por ello se retiró el jueves de una reunión técnica convocada para analizar el informe final. En Washington, el subsecretario de Estado, Peter Tarnoff, explicó que la comisión investigadora concluyó también que Cuba no cumplió con las normas internacionales de avisar a las dos avionetas sobre la violación del espacio aéreo.
Por otra parte, el jueves fue expulsada de Cuba una delegada de la Comisión para la Protección de Periodistas (CPP), informaron ayer en Nueva York fuentes de la organización de defensa de la Prensa. Suzanne Bilello, que fue acusada por las autoridades cubanas de realizar «actividades contrarrevolucionarias», llegó a Cuba procedente de México el pasado día 16 con un visado de turista. Allí se reunió con periodistas de cinco nuevas agencias de prensa independientes, a los que regaló objetos como bolígrafos, cuadernos... Ello, según los policías que le interrogaron, constituía un apoyo a la «rebelión».
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