Payá lanza un nuevo reto al régimen

Ante un inminente proceso electoral municipal en Cuba, el disidente Oswaldo Payá desafió ayer a las autoridades cubanas y les pidió un espacio televisivo de 15 minutos para exponer sus opiniones.

Payá, líder de dos proyectos opositores, reaccionó a declaraciones del presidente del Parlamento, Ricardo Alarcón, quien manifestó la semana pasada que los activistas contrarios al gobierno sí podían ser candidatos en los comicios para delegados de abril.

''Los vuelvo a desafiar. A que no se atreven a permitirme 15 minutos en la televisión que pagamos todo el pueblo con nuestro trabajo, aunque después hablen seis horas cada uno (los representantes gubernamentales)'', expresó Payá en una declaración distribuida a la prensa extranjera.

En la isla todos los medios de comunicación pertenecen al Estado.

Paralelamente, Payá recordó que las declaraciones de Alarcón no fueron publicadas al interior de Cuba, sino reproducidas por agencias internacionales.

''El señor Alarcón debe decirlo aquí y decirlo de manera tan clara que los ciudadanos se lo crean'', manifestó el disidente cubano, quien ha dicho que sus compatriotas viven con miedo a perder privilegios o empleos si expresan sus opiniones.

Consultado por la Associated Press, Ernesto Martini, uno de los principales colaboradores de Payá, dejó en claro que el disidente no tiene intenciones de presentarse como candidato.

Debido al hecho de que en Cuba no existen partidos políticos opositores, los delegados municipales, diputados y otros cargos son postulados en los barrios por los propios vecinos y avalados por una comisión electoral.

Polémicos por su estructura los comicios en la nación caribeña son criticados por Estados Unidos y otras naciones, mientras que los disidentes aseguran que se les impide propagar sus ideas.

''Si no hay derecho, no son verdaderas las elecciones'', lamentó el documento de Payá, autor de una iniciativa (Proyecto Varela) para pedirle al gobierno que realice un referéndum sobre si los cubanos desean mayores derechos civiles, y de otra (Diálogo Nacional) que pide reuniones de pequeños grupos para discutir sobre una transición en la isla.

Según las autoridades, los disidentes no se presentan en los comicios debido a que carecen de apoyo local.