La suerte de los cinco cubanos condenados por espionaje en Estados Unidos dio ayer un giro legal prácticamente irreversible cuando un panel de jueces del Onceno Circuito de Apelaciones negó la petición de la defensa para realizarles un nuevo proceso judicial y ratificó las sentencias dictadas por un tribunal de Miami en el 2001.
En un dictamen de 120 páginas, el pleno de 12 jueces del Tribunal de Atlanta decidió por mayoría de 10-2 que no existen razones para considerar que el veredicto inicial estuvo influido por prejuicios y parcialidad de los jurados.
''En el expediente del proceso judicial no existe ninguna evidencia que sugiera que el juez [Joan Lenard] no pudiera seleccionar a 12 jurados imparciales para juzgar a los acusados justa e imparcialmente'', expresa el documento. ``Por esas razones, ratificamos la negativa a las mociones de la defensa para cambiar la jurisdicción del caso y realizar un nuevo juicio''.
El texto expresa que el cargado ambiente de publicidad anticastrista que rodeó el caso no impidió la realización de un proceso justo contra los cinco acusados.
El trascendental dictamen se produce exactamente un año después de que un panel de tres jueces del Tribunal de Atlanta anulara por unanimidad el juicio realizado en Miami, considerando que el proceso estuvo plagado de ''problemas procesales por parte de la fiscalía'' y por prejuicios políticos de la comunidad exiliada.
Pero la fiscalía del distrito de Miami procedió de inmediato a apelar la consideración de la tríada ante el pleno judicial del Onceno Circuito, que el pasado febrero accedió a escuchar los argumentos de ambas partes para revaluar el veredicto.
Al ratificarse las condenas de los cinco hombres presos en cárceles estadounidenses, las alternativas legales de la defensa quedan reducidas a someter el caso al Tribunal Supremo de la nación, que incluso no estaría obligado a aceptarlo.
Sin embargo, el abogado Richard Klugh dijo anoche que la defensa ``no había determinado su próxima estrategia''.
El veredicto se produce en momentos en que el gobierno de Cuba despliega una intensa campaña internacional en favor de la liberación de los cinco hombres, que califica como ''héroes prisioneros del imperio''. La Mesa Redonda, el programa informativo estelar de la televisión cubana, estuvo dedicada ayer al tema con la presencia del presidente del parlamento, Ricardo Alarcón.
Justamente ayer fue lanzada en La Habana una campaña de movilización por la libertad de Gerardo Hernández, Ramón Labañino, René González, Fernando González y Antonio Guerrero, la cual se desarrollará entre el 12 de septiembre y el 6 de octubre.
Los cinco hombres fueron arrestados en septiembre de 1998 bajo acusaciones de integrar una red de espionaje del gobierno cubano. Las sentencias dictadas oscilan entre 15 años y cadena perpetua.