Por José J.
Basulto
Cuatro años atrás, el 24 de febrero de 1996, aviones MiG de
Castro atacaron a tres aviones desarmados del exilio, derribando a dos y causando la
muerte a sus cuatro ocupantes. El avión que sobrevivió tenía por matrícula el número
2506.
El uso de este número respondía al tributo
respetuoso que los fundadores de Hermanos al Rescate (HAR), que fueron también fundadores
de la Brigada 2506, hacían a sus compañeros caídos en la gesta de 1961, uno de los
primeros intentos de rescate de la nación cubana bajo Castro.
Treinta y cinco años después de Girón, el 2506
nuevamente se encuentra en una encerrona bajo el fuego enemigo. Esta vez la premeditación
asesina del enemigo se unió al conocimiento, consentimiento, y cooperación del
antiguo aliado, los EEUU, ahora bajo la Administración de Bill Clinton. Una nueva traición, un nuevo silencio cómplice de
los conocedores, de los que les conviene y prefieren desconocer, así como de los
involucrados.
Castro confiesa públicamente haber dado la orden,
ensalza y también publica los nombres de los pilotos asesinos, ahora envalentonados y
enardecidos ante la impunidad concedida por su jefe y lo fácil del crimen.
Los Estados Unidos, implicado en el hecho por su
propia presidencia, toma medidas de respuesta de carácter cosmético, ignora sus propias
leyes antiterroristas, no encausa a Castro por lo criminal a pesar de la amplia evidencia
de su culpabilidad y se niega a responder a las preguntas hechas por HAR sobre su
actuación antes, durante y después del crimen, alegando razones de seguridad nacional.
Ahora, durante este año electoral, nos toca a los
cubanos con voto en los EEUU, así como a aquéllos que ostentan o pretenden ostentar la
representación digna de la Brigada 2506, demandar justicia y verdad por las vidas de Armando,
Carlos, Mario y Pablo.
Le corresponde a la Brigada 2506 emplazar a la
presente administración Clinton-Gore a:
1. Encausar
por lo criminal a Fidel Castro y a los otros principales perpetradores de estos crímenes,
y
2. Responder abiertamente por qué le permitió a Castro, enemigo hasta la muerte de EEUU, asesinar a cuatro patriotas cubanos pro-democracia, que actuaban de forma noviolenta en una misión humanitaria, al desactivar temporalmente y en el preciso momento del derribo, el mecanismo de defensa antiaéreo de EEUU, que hubiera evitado el derribo de los aviones y que existía para tales ocasiones.
¡Esta Lucha Es
Nuestra
No se edifica sobre cimientos ajenos. La vieja práctica del camino rápido para la acción política hacia Cuba, en nombre de nuestra causa, con recursos de terceros, no conduce al fin deseado. Playa Girón nos dio la mejor prueba en 1961. Espero que no repitamos el error.
La tentación es grande y la carne es débil. A continuación reproducimos un memorandum interno de HAR escrito en 1997, al nuevo comienzo de los síntomas y muy vigente hoy. Nos creemos en la obligación de hacer público nuestro punto de vista. Nos consta que hay ciertas organizaciones de exiliados que reciben ayuda económica norteamericana y la ponen, de buena fe, al servicio de la causa cubana. Para ellos, nuestro mayor respeto.
[1ro de mayo de 1997]
Un Nuevo
Cordón Umbilical: Manipulación, Sutileza y Protagonismo Político Artificial
1. Existe una base
económica propia y suficiente en el exilio para poder financiar el esfuerzo.
2. Este tipo de ayuda crea dependencia en la misma. Nos compromete y nos crea obligaciones innecesarias.
3. La dependencia económica es la mejor pre-condición para que se nos controle.
4. El aceptarla, en ciertos términos, tendría un costo para nuestra propia estima y dignidad
política.
5. Si creemos en nuestra independencia y soberanía
como valores importantes, tenemos que actuar de forma consecuente. Los fondos para nuestra
lucha son también responsabilidad nuestra.
6. En el pasado los fondos norteamericanos han
DIVIDIDO EL ESFUERZO, creando LIDERES ARTIFICIALES, afines a sus intereses, así como
ORGANIZACIONES FANTASMAS, carentes de representación popular.
7. Ha
dañado la posibilidad de alianzas entre nuestras organizaciones, al hacerles creer que dicha ayuda les haría
autosuficientes y por lo tanto podían prescindir de tener que cooperar entre ellas.
8. Ha servido para crear la percepción negativa,
entre los cubanos de base, que su contribución deja de ser necesaria al comprometerse Estados Unidos a proveer
dichos fondos.
9. La participación económica en el esfuerzo es una responsabilidad cívica de todo cubano.
Aceptar ayuda extranjera menoscaba dicha responsabilidad. La ayuda económica es la forma más asequible para la militancia del
exiliado.
10. Dicha ayuda crea burocracias
artificiales que tienden a responder más a sus propios intereses privados y
preservación que a los fines que supuestamente profesan.
11. Dicha ayuda crea desequilibrio
y representación artificial entre las organizaciones que la reciben. Esto sucede por
tratarse de un gobierno extranjero, que actúa arbitrariamente, y no el pueblo cubano o el
consenso del exilio quien determina la razón y la forma para la distribución y el uso de
dichos fondos.
12. Dicha ayuda crea un
vínculo de enlace (Estados Unidos) que queda por encima de las organizaciones y
personas que la reciben. Este nuevo vínculo es capaz de forjar coaliciones que sólo son cubanas de nombre.
13. Tiende a suplantar la
autogestión contenida en la posible
economía propia con el característico paternalismo
controlador, responsable de fracasos anteriores.
14. El propósito de la ayuda extranjera prevalece, si se pierde
la alternativa de usar nuestra propia economía. Se
subvierten, de esta forma, los objetivos
originales de nuestra lucha.
15. Al tener dicha ayuda un fin inequívocamente político,
sentaría la misma un precedente negativo para
nuestra conducta futura en Cuba.
Consideramos dichos fondos
como la peor ingerencia de Estados Unidos en el proceso por la libertad de Cuba. Este tipo de ayuda creó en el pasado serias y
duraderas divisiones entre los cubanos. Así surgieron (se fabricaron) algunos de nuestros
dirigentes y líderes de 1961, como también se hizo posible el abandono a la
resistencia clandestina en Cuba y por último Playa Girón.
HERMANOS AL RESCATE DENUNCIA, ASI COMO RECHAZA, TODA
PARTICIPACION EN DICHA AYUDA.
Dios escoge
personas y momentos especiales para comunicarse con cada uno de nosotros. A veces el
mensaje es directo y de carácter personal para el aludido, pero otras veces éste reviste
características verdaderamente universales, con las que todos somos tocados
Dios no hace
milagros a medias y, por tanto, el futuro de este pequeño hombrecito, conocedor de su
realidad presente, tendrá un desenlace para el cual todo lo ocurrido y por ocurrir aún
será necesario dentro de su plan divino, que reserva el sufrimiento para sus mensajeros
mejor escogidos. Sólo nos queda ayudar a Elián en todo aquello que le facilite su
misión en esta vida, conscientes de que su destino es servir su propósito, dondequiera
que Dios le depare.
[Mis Dos
Héroes por José J. Basulto