Los políticos, cuando apelan a nosotros buscando nuestro voto, se han acostumbrado a depender de los sentimientos anti-castristas que predominan en nuestra comunidad más que de nuestras aspiraciones pro-democracia. Simplemente es más fácil expresar críticas que hacer una propuesta concreta destinada a deponer a Castro o a forzarlo hacia una apertura a la democracia. Esta estrategia de censura y acción punitiva vs. la otra, que se orienta a obtener resultados prácticos, ha sido nuestro punto de discordancia con los sucesivos gobiernos de E.U. a la hora de definir una política exterior hacia Cuba.

La plataforma política de los partidos y los candidatos que aspiran a ostentar el poder y dirigirnos, no son mas que otro producto de consumo que se nos ofrece en esta sociedad abierta y es de beneficio nuestro que el principio de la libre competencia aplique aquí con más razón que con ningún otro producto. Sólo así podemos comparar sus méritos y seleccionar la mejor opción. Nuestra lealtad sólo debe estar comprometida con nuestros intereses. Miremos bien quien mejor esté dispuesto a servirlos. No es necesario votar desde ahora, faltan todavía meses para Noviembre y sobra tiempo para que materializen promesas y buenas intenciones.

El comprometer nuestro voto desde temprano y sin tener un compromiso efectivo sobre los temas que nos interesan, y con los cuales los candidatos especulan, crea el desinterés de servirnos de parte de los políticos así como una entrega innecesaria, de parte nuestra, hacia quienes pueden hacer mucho más por nosotros. Es bueno que se sepa bien lo que queremos así como nuestra disposición a recompensar con el voto a aquellos que se comprometan a hacerlo posible.

Durante su visita del 20 de mayo, el Presidente George Bush se hizo eco de las once mil firmas dirigidas al gobierno Cubano por nuestros hermanos en la Isla, solicitando un referendum pro-democracia en Cuba. Sin embargo, ignoró el reclamo de justicia, hecho aquí por nuestra comunidad y que fue respaldado por ciento veinte mil firmas dirigidas a él, pidiendo el encausamiento de Castro. Contrario a solicitar acciones que dependen de Castro o su gobierno, el Presidente Bush sí tiene la prerogativa para actuar sobre nuestra petición.

Hermanos al Rescate expresó sus aspiraciones cuando entregó el pasado año, personalmente, una carta al Presidente George W. Bush en la Casa Blanca y a su hermano el Gobernador Jeb Bush, que aspira a ser re-elegido gobernador de la Florida en Noviembre. Nuestra carta, con la petición de encausamiento a Castro, fue respaldada por una petición de firmas en nuestra comunidad.

Nuevamente, el pasado 24 de febrero de 2002 en el sexto aniversario del asesinato de nuestros pilotos por los MiGs de Castro, y en una conferancia de prensa en el aeropuerto de Opa-Locka, solicitamos tres acciones concretas de parte del presidente Bush:

1) El encausamiento criminal de Fidel Castro por el asesinato de nuestros hermanos Armando, Carlos, Mario y Pablo en 1996, acción a tomarse bajo "The rule of Law" ( La regla de la ley ).

2) El reconocimiento, respaldo y respeto a la independencia de acción, que se le debe otorgar a la oposición interna en Cuba, como la verdadera y la legítima alternativa al castrismo en la Isla.

3)El uso efectivo de Radio y Television Martí. La voluntad política de poner a la diposición del pueblo de Cuba a ambos medios de información, los recursos necesarios para que sus señales puedan alcanzar a todos los cubanos en la Isla.

Las acciones que se tomen, o se dejen de tomar, sobre estos tres puntos tendran gran peso en mi voto, o ausencia del mismo en Noviembre. Entretanto pienso informarme, comparar las promesas del pasado con la realidad del presente y estaré sobre todo al tanto de los pasos que den los candidatos con respecto a nuestra petición y de cualquier otra medida concreta que beneficie a la oposición en Cuba. Pasó ya el tiempo para la retórica electoral con los cubano-americanos.